El técnico del Sevilla, Quique, ha dado hoy una nueva comprensión de su relación con Youssef En-Nesyri.
Obviamente, muchas cosas se producen después de que la pareja se asociara con una disputa abierta de principio a fin que precedió a la ruptura mundial.
En el camino hacia una inevitable derrota por 2-1 ante el Celta de Vigo, el líder En-Nesyri, que despidió al único objetivo del día de su equipo, se vio atrapado en los procedimientos sobre la hora de juego.
Esto provocó una reacción furiosa hacia el marroquí, que dependía de patear botellas de agua mientras avanzaba hacia el asiento.
Por lo tanto, desconcertado por las actividades de su estrella goleadora, el técnico del Sevilla, Quique, inmediatamente se movió para enfrentarse a En-Nesyri.
No retirarse, la última opción entonces, en ese momento, tuiteó a su director, y Luis Ocampos finalmente se vio obligado a intervenir para aislar a la pareja.
En-Nesyri se apresuró a restar importancia al episodio, pero Quique se mostró menos indulgente.
Una vez más, durante su última sesión de preguntas y respuestas del viernes, no sorprendió que el tema de las relaciones entre él y su delantero fuera planteado al administrador del Sevilla.
Además, en esta ocasión Quique se mostró con un temperamento claramente más seguro.
“La relación es ahora como antes del conflicto”, comenzó el español, según informó Mundo Deportivo. “Acepto que el discurso es el mejor intérprete en medio de la contienda. Cuando él vino nos dimos un abrazo, nos miramos desde el minuto uno y desde el principio y comprendemos que hemos ganado con esta circunstancia actual.
Mi “Aprendemos que la fortaleza mental también consiste en quedarse quieto. La audacia es muy buena para proteger las circunstancias, pero quedarse quieto es mejor porque es más difícil.
El abrazo se ha sentido y lo mejor es que el entrenador y el goleador están juntos en este momento”.
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